domingo, febrero 22, 2015
Que pretenciosa
Descargar las palabras
solo descargarlas sin conciencia
como queriendo salir de mi cueva,
sacarme de un momento a otro
el traje de invisible de siempre.
¡Qué pretenciosa fui!,
no sé qué buscaba,
y hace unos días me desnudaba frente al espejo: y reí.
Luego, en una solitaria conversación analicé lo que soy: me avergoncé.
Más tarde, oyendo a Leonard Cohen, comprendí...
que había una pretenciosa
que ridícula juega a la sincera
y que dice lo que dice,
que siempre arriesga todo,
para después asumir que debe disculparse,
reírse, ponerse el traje
y seguir,
ni feliz, ni triste, solo seguir.
16/02/2015
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